martes, 3 de noviembre de 2009

Sobre la hipocrecía en la política...

En los tiempos que corren, y que dicho sea de paso no son buenos, me parece increible que se espere del ciudadano una fe ciega en la política.


Cómo pretenden que el ciudadano medio, que bastante tiene con soportar sus penurias, sea capaz de confiar en la clase política, cuando no hacemos otra cosa que ver enfrentamientos que podrían calificarse de patio de escuela?
Cómo pretende un supuesto líder de partido que confiemos en su capacidad para gobernar españa, cuando ni siquiera es capaz de gobernar su propio partido??
Rajoy ha dilapidado su imagen de bonachón reemplazándola por una de líder sin capacidad de mando.

Sr. Rajoy
Con que todo lo ocurrido en los ultimos tiempos en su partido:
  • Caso Gürtel
  • Rencillas de poder con la Caja Madrid de fondo.
  • Espionajes dentro del propio partido a saber con que finalidad, que no fue investigado hasta que la presidenta de la comunidad no lo quizo oportuno utilizando su mayoria absoluta.
  • Casos de corrupción con investigaciones a hoy día abiertas y con imputados encarcelados, que apuntan a dirigentes regionales.
  • Más un largo etc etc.
Usted no puede esperar el voto, ya no electoral, si no de confianza por parte del ciudadano.

Desgraciadamente, al ser inmigrante, no puedo votar en los distintos comicios españoles.
De haber podido en los últimos, habría votado a Zapatero. Porque me parecía que merecia un voto de confianza.

Zapatero tenia muy buenas intenciones pero, desgraciadamente, se quedó solo en eso, buenas intenciones.
No voy a hecharle la culpa de la crisis. Esta crisis viene de años atrás.
Pero si hay que echarle en cara la mala gestión que hizo de ella. El haberla negado cuando los síntomas eran evidentes. Bien dice el refrán que no hay más ciego que el que no quiere ver.

Salir de la coyuntura en la que nos encontramos es cuestión de discutir, pero discutir tal y como viene en su primera definición del diccionario
Examinar y tratar entre varias personas un asunto o un tema para solucionarlo o para explicarlo.
Y en dicha discusión deberíamos estar presentes todos. Gobierno, oposición, patronal, trabajadores, desempleados ( no deberíamos olvidar que son un casi 10% de España ) y los imigrantes ( otro 10% de España ).

Cuando nos demos cuenta que esto es una urgencia quizas empecemos a hacer las cosas bién.

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